Autores
A. Gañán Boscá, C. García Bautista, M. Serrano Criado, R. Mongil Poce, C. Pagés Navarrete, R. Arrabal Sánchez
Introducción
Con la mejora de la quimioterapia e inmunoterapia neoadyuvantes muchos pacientes con cáncer de pulmón que se consideraban irresecables tienen una nueva oportunidad que en el futuro es posible que cada vez sea más frecuente. A continuación, presentamos el caso de una resección broncoplástica tras tratamiento neoadyuvante con quimioterapia que ilustra las dificultades técnicas que podemos encontrarnos.
Metodología
Se presenta comunicación en formato vídeo obtenido de los registros audiovisuales de nuestro servicio en pacientes intervenidos. Se recoge información del paciente de la base de datos hospitalaria respecto a anatomía patológica, intervención, quimioterapia neoadyuvante y seguimiento.
Resultados
Presentamos el caso de un paciente con adenocarcinoma de recto y pulmonar sincrónicos, en el que se observa la presencia de un ganglio paratraqueal derecho PET + con EBUS que confirma histología de metástasis de adenocarcinoma primario pulmonar. Dicho paciente fue valorado en comité donde se decidió realizar quimioterapia neoadyuvante con paclitaxel y carboplatino. Posteriormente fue intervenido mediante lobectomía superior derecha y linfadenectomía VATS uniportal con broncoplastia.
Durante la intervención puede observarse en todo momento la especial dificultad a la hora de realizar la disección y obtener buenos planos tisulares que faciliten la misma, así como mayor cantidad de sangrados de carácter leve. También se evidencia la dificultad añadida a una correcta linfadenectomía (especialmente paratraqueal derecha) necesaria para facilitar la realización de la broncoplastia.
Conclusiones
Pese a que el paciente presentó un postoperatorio favorable, sin incidencias y que en la actualidad no se ha observado signos de recidiva, es importante destacar la dificultad técnica de la intervención al tratar con tejidos de difícil disección.
Este tipo de intervenciones probablemente irán en aumento conforme continúen mejorando las terapias oncológicas neoadyuvantes, por lo que es posible que pacientes en los que la cirugía no se consideraba una opción supongan un nuevo reto para nuestra especialidad.