Autores
A. López León, M. Martos Maldonado, J.M. Díaz López, D. Fole Vázquez, J.J. Cruz Rueda
Introducción
El asma grave no controlado supone un desafío en la práctica clínica de Neumología. Actualmente existe indicación de uso de fármacos biológicos cuando el resto de tratamiento disponible resulta insuficiente (escalón 6 de GEMA). Benralizumab es un anticuerpo monoclonal, indicado como terapia de apoyo en asma grave de perfil eosinofílico (>150/mm3), que actúa bloqueando IL-5R. Nuestro estudio intenta reflejar las características de los pacientes que reciben el fármaco en nuestro hospital y su respuesta al mismo.
Metodología
Realizamos el análisis de los 34 pacientes que reciben Benralizumab en Hospital Torrecárdenas (Almería), a 23/09/22, utilizando el registro de consumos proporcionado por Farmacia Hospitalaria. Consideramos variables como son datos demográficos, comorbilidades, fecha de diagnóstico de asma bronquial y evolución de FEV1, eosinófilos, estado sintomático, hospitalizaciones y necesidad de corticoterapia oral tras recibir el tratamiento.
Resultados
Se pudieron analizar 28 de los 34 pacientes.
Atendiendo al sexo, un 54% de pacientes eran hombres y el 46% mujeres. La comorbilidad más frecuente (86%) fue sobrepeso/obesidad (IMC medio 28,5). En un 39% constaba poliposis nasal.
Una media de 16 años (extremos 2 y 50) transcurrieron entre el diagnóstico de asma bronquial e inicio del fármaco.
La mejoría de FEV1 se objetivó en 24 pacientes (86%), siendo esta de una media de 821 mL. En 18 (64%) se alcanzó un valor superior al 80%, solo 4 (14%) lo superaban previamente a Benralizumab.
La eosinofilia media al inicio del tratamiento fue de 623/mm3. Todos anularon la cifra.
La disnea habitual (mMRC>1) fue un síntoma habitual en estos pacientes (86%), pasando a presentarla un 25% tras el fármaco.
En el último año con tratamiento, 9 (32%) sufrieron agudizaciones (de media 2), no precisando ninguna hospitalización. En último año previo al fármaco, 23 (82%) tuvieron agudizaciones.
27 pacientes (96%) vieron reducida su necesidad de corticoides orales tras Benralizumab, siendo esta reducción de un 76%, globalmente.
Conclusiones