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Comunicaciones del 46º Congreso Neumosur. Edición Virtual.

UTILIDAD DE LA PRUEBA DE ESFUERZO CARDIOPULMONAR (PECP) EN LA PREDICCIÓN DE MORBILIDAD POR CIRUGÍA DE RESECCIÓN PULMONAR.

Autores

C. España Domínguez, M. Morales González, A. Marín Andreu, I. Muñoz Ramírez, A. Hidalgo Molina, A. Arnedillo Muñoz

Introducción

El objetivo de nuestro trabajo fue analizar que variables de las analizadas durante la PECP se relacionan con la presentación de complicaciones postoperatorias.

Metodología

Estudio retrospectivo observacional. Se incluyeron todos los pacientes a los que se les había realizado una PECP para valoración de operabilidad y que posteriormente se habían sometido a intervención de resección pulmonar desde junio de 2010 a octubre de 2019. Se recogieron los datos demográficos, los valores de las pruebas funcionales respiratorias (PFR) y de la PECP, el índice de Charlson preoperatorio, el tipo de intervención, el resultado histológico y estadio neoplásico, las complicaciones postoperatorias en los 30 días posteriores a la intervención y la duración del ingreso hospitalario. Se analizaron los datos mediante el programa SPSS versión 15.0 y para el estudio de las relaciones entre variables si utilizó el Test de Student y Chi cuadrado.

Resultados

Se estudiaron un total de 100 pacientes (88 varones). Con una media de edad de 65,89 ± 7,3 años. En las PFR la media en los diferentes valores fueron: FVC%: 68,47 ± 13,15; FEV1%: 54,18 ± 13,57; DLCO%: 61,84 ± 16,87. En las PECP los resultados mostraron medias de VO2/kg máx: 15,68 ± 3,34 ml/kg/min. VO2 máx %: 64,14 ± 12,67 %; RER máx: 1,04 ± 0,15. EqCO2 (AT): 37,95 ± 26,58. La media del Índice de Charlson fue de 5.29 ± 1.38. 48 pacientes fueron sometidos a resección atípica, 44 a lobectomía, 8 a neumenectomía. En 39 pacientes el diagnóstico histológico fue de adenocarcinoma, en 35 de epidermoide, 10 presentaron otras estirpes de cáncer de pulmón y en 16 no se encontró evidencia de neoplasia. 44 pacientes presentaron un estadio final I, 20 II, 16 III 4 IV. El 36% presentó complicaciones postoperatorias, siendo las más frecuentes la fuga aérea prolongada (9), el enfisema subcutáneo (9). Hubo 5 casos de neumotórax, 3 de neumonías, 2 de hemorragias y solo 1 caso de empiema, quilotórax, hemotórax, cámara pleural residual, atelectasia, pericarditis, edema agudo de pulmón y 1 sólo fallecimiento. La media de días de ingresos fue de 7 ± 6.7. Con respecto a los resultados de las pruebas para operabilidad, sólo con el RER máx obtuvimos un resultado estadísticamente significativo en la predicción de complicaciones postoperatorias, a menor RER máx, mayor probabilidad de complicaciones, con una p < 0,011, pero no en todos los sujetos se pudo obtener dicho valor, por no alcanzar algunos el esfuerzo máximo. También el estadio mostró relación con la frecuencia en presentación de complicaciones, a mayor estadio mayor probabilidad con una p < 0,26. El número de días de hospitalización también se relacionó con la presentación de complicaciones con una p < 0,009.

Conclusiones

Nuestros resultados muestran que el RER máx es válido como predictor de complicaciones postoperatorias, con la limitación de que es preciso que se alcance un esfuerzo máximo durante la PECP para obtener dicho valor. También el estadio del cáncer va a predecir la probabilidad de complicaciones.

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