Autores
I.Asschert Agüero, F.L.Márquez Pérez, J.Hernández Borge, L.M.Sierra Murillo, P.A.Pires Santos Martins Goncalves, M.Benitez Cano Gamonoso
Introducción
La EPOC es una entidad con un importante impacto y consumo de recursos en nuestra sociedad y el manejo de estos pacientes desde el punto de vista tanto diagnóstico como terapéutico es mejorable. Existen dos guías clínicas, GesEPOC y GOLD, con abordajes diferentes que nos orientan a clasificar y tratar a estos pacientes.
Como objetivos nos hemos planteado conocer las características de los pacientes diagnosticados de EPOC atendidos en consultas externas del servicio de neumología del CHUB y el grado de adecuación de su manejo a las guías GOLD y GesEPOC, así como conocer el grado de sobrediagnóstico y sobretratamiento, comparar pacientes con diagnóstico correcto vs pacientes con diagnóstico incorrecto y detectar posibles factores relacionados con un diagnóstico adecuado y una mayor calidad en la atención recibida.
Metodología
Auditoría clínica de los informes realizados en consultas externas de CHUB desde Noviembre de 2015 a Enero de 2016. Se analizaron aquellos informes de pacientes diagnosticados previamente de EPOC, divididos en dos grupos en base a criterios de inclusión (diagnóstico correcto). Se realizó un estudio descriptivo del grupo incluido, comparación entre ambos grupos y análisis de la variable ?visita de calidad óptima? (definida como valoración por las 2 guías y tratamiento adecuado a estas) así como diferencias y posibles factores influyentes en dicha calidad.
Resultados
Los pacientes con diagnóstico correcto de EPOC constituyeron un 16% del total de las consultas generales de Neumología, siendo un 86,6% varones con una media de edad de 70 ± 9.3 años. Un 29.6% eran fumadores activos con ICAT elevado (50,7 +/- 27.8).
La guía más utilizada fue la GOLD. El tratamiento más prescrito fue la triple terapia (LAMA+LABA+CI inhalados) en un 40% del total, existiendo una sobreutilización de CI inhalados. Existió un bajo porcentaje de pacientes (14%) que cumplieran el criterio de calidad óptima, y en ellos encontramos más agudizaciones, más pacientes con DLCO y espirometría realizada y estadios más avanzados de la enfermedad. En el análisis multivariante obtuvieron mayor posibilidad de tener una consulta de calidad óptima los fumadores activos, aquellos con más agudizaciones y los que tenían una DLCO y espirometría previas.
Conclusiones
La utilización de guías de práctica clínica en EPOC es incompleta y mejorable, así como el manejo diagnóstico-terapéutico ajustado a éstas.
Analizando los factores que se asocian a las ?visitas de calidad óptima? y la adecuación del tratamiento instaurado podremos facilitar la proposición de vías de mejora.