Autores
E. CABRERA CÉSAR, Mº C. GARCÍA FERNÁNDEZ, N. REINA MARFIL, L. PIÑEL JIMENEZ, Mº C. VERA SÁNCHEZ, L. LÓPEZ LÓPEZ, J.L. VELASCO GARRIDO, MV. HIDALGO SANJUAN
Introducción
En España el número de muertes anuales atribuibles al consumo de tabaco se sitúa en 50.000. Sigue siendo en nuestro país la primera causa aislada de enfermedad evitable y muerte prematura. El tabaquismo es reconocido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) entre otras entidades, como una enfermedad crónica, así todos los pacientes ingresados en un hospital deben ser interrogados sobre su hábito tabáquico, tal es así que algunos autores postulan que debe ser registrado como otra constante vital.
El objetivo es evaluar el impacto que tiene sobre los fumadores un primer ingreso en nuestro servicio de Neumología, analizando la abstinencia tabáquica a los 12 y 18 meses en función del diagnóstico al alta.
Metodología
Se ha realizado un estudio prospectivo, observacional, no intervencionista sobre 221 pacientes fumadores que ingresaron entre Abril 2013-Abril 2014, identificando la tasa de abstinencia tabáquica a los 12 y 18 meses tras ser dados de alta, analizando dicha tasa en función de cada diagnóstico.
Resultados
De los 221 sujetos fumadores que ingresaron entre Abril 2013-Abril 2014 se ha podido hacer seguimiento de 129 sujetos. A los doce meses el 41,61% se mantenía sin fumar, ésta cifra se reducía a un 35,43% a los 18 meses.
Analizando el abandono tabáquico por patologías, observamos que a los 12 meses mantenían la abstinencia: 1) el 60% (n=3) de los sujetos que ingresaron por tromboembolismo pulmonar; 2) el 54,5% (n=6) de los neumotórax; 3) el 32% (n=8) de los pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica; 4) un 30,8% (n=4) de los diagnosticados de neoplasia; 5) un 30,4% (n=14) de los sujetos con neumonía; 6) ningún asmático dejó de fumar tras el ingreso.
A los 18 meses permanecen sin fumar: 1) el 40% (n=2) de los sujetos que ingresaron por tromboembolismo pulmonar; 2) el 45,5% (n=5) de los neumotórax; 3) el 16% (n=4) de los pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica; 4) un 15,4% (n=2) de los diagnosticados de neoplasia; 5) un 19,6% (n=9) de los sujetos con neumonía; 6) ningún asmático dejó de fumar.
Conclusiones
La tasa de abstinencia tabáquica disminuye con el tiempo, por lo que se requiere un seguimiento más estrecho para evitar la recaída en pacientes fumadores.
La tasa de abstinencia tabáquica en enfermedades crónicas como el EPOC disminuye a los meses del ingreso.
Ningún paciente asmático, que requirió ingreso, dejó de fumar al alta.
El ingreso hospitalario ofrece al fumador una oportunidad ideal para abandonar el tabaco, viéndose esto favorecido por diversas circunstancias como el ser un espacio libre de humos, el contacto con el personal sanitario y el empeoramiento de su salud.