Autores
B. Navas Bueno, J. M. Vaquero Barrios, F. Santos Luna, M. J. Cobos Ceballos, M. C. Fernández Marín, L. Muñoz Cabrera
Introducción
Evaluar la eficacia de tobramicina nebulizada –TOBI®− en la modificación de la historia natural de la enfermedad, identificar los efectos adversos y sopesar el impacto microbiológico sobre la flora bacteriana bronquial.
Metodología
Entre Mayo de 2004 y Marzo de 2006 aquellos pacientes con bronquiectasias, excepto las secundarias a fibrosis quística, que presentaban colonización bronquial por Pseudomonas aeruginosa iniciaron tratamiento con TOBI® 300 mg dos veces al día en pauta alterante on/off cada 28 días, una vez aprobado su empleo como fármaco de uso compasivo. Se recogieron, previos al tratamiento, el número de agudizaciones, la función pulmonar, los aislamientos microbiológicos y la concentración mínima inhibitoria –CMI– para aminoglucósidos. Al noveno mes de tratamiento, los pacientes se volvieron a reevaluar con los mismos parámetros junto a la identificación de los posibles efectos adversos.
Resultados
Comenzaron el tratamiento 19 pacientes y lo finalizaron 15. La media de FEV1 previo al inicio del tratamiento fue de 51.6 ± 15.1 %, y al finalizar el mismo fue de 54.1 ± 17.1 (sin diferencias significativas, p 0.068). El número de agudizaciones que requirieron tratamiento antibiótico, en los mueve meses previos al tratamiento con TOBI®, fue de 5.53 ± 2.7, significativamente superior a las recogidas al final de la intervención terapéutica (0.8 ± 1; p=0.001). La media de la CMI para tobramicina fue de 2.8 ± 2.1 mcg/ml antes del tratamiento y de 5.8 ± 2.7 al finalizar el estudio (p=0.02). Siete pacientes presentaron efectos secundarios aunque sólo en dos hubo de suspenderse la medicación debido a ellos.
Conclusiones
El uso de TOBI® no mejora la función pulmonar en estos pacientes pero si disminuye el número de agudizaciones que deterioran la calidad de vida, a expensas de un aumento de efectos secundarios y de resistencias microbiológicas sin impacto clínico relevante.